Un análisis del primer trimestre de 2025 muestra que México sigue dependiendo de combustibles importados, con Pemex como principal comprador internacional pese a tener siete refinerías operando.
Los números del IMCO pintan un panorama preocupante: mientras Pemex produce 323 mil barriles diarios de gasolina, México necesita importar 421 mil adicionales para que los automóviles sigan circulando. Es decir, por cada barril que sale de las refinerías nacionales, entran 1.3 barriles del extranjero.
El proyecto estrella de la administración pasada, la refinería Olmeca en Tabasco, aportó solo 8 mil barriles diarios en el primer trimestre:
4.8% de su capacidad proyectada (170 mil barriles)
2.5% del total nacional
Mismo nivel que una refinería pequeña como la de Cadereyta
"Es como tener un Ferrari guardado en el garage", comenta un analista energético que prefirió el anonimato. "El potencial está ahí, pero no acaba de arrancar".
La paradoja es profunda:
🔹 La petrolera estatal opera 7 refinerías (incluyendo Tula y Salina Cruz).
🔹 Pero también es responsable del 73.2% de las importaciones.
🔹 Mientras, los privados (con solo 5 permisos vigentes) cubren el 26.8% restante.
Lo más grave: el negocio de refinación de Pemex Transformación Industrial acumula $1.68 billones en pérdidas desde 2015.
Expertos señalan tres problemas de fondo:
Refinerías obsoletas: Con capacidades reducidas por falta de mantenimiento.
Inversiones mal planeadas: Como Dos Bocas, que sigue en construcción 3 años después de su "inauguración".
Dependencia histórica: Desde 2018, México importa más gasolina de la que produce.
¿Hay solución? Algunos sugieren modernizar las refinerías existentes antes de construir nuevas, pero requiere inversiones que Pemex no tiene.
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