Conoce los detalles del acuerdo entre el Gobierno y empresarios gasolineros para mantener la gasolina regular en 24 pesos por litro y los desafíos que enfrenta esta medida para evitar futuros gasolinazos.
El famoso “gasolinazo” parece tomarse un respiro. Según un documento filtrado y citado por distintas fuentes cercanas al gobierno, la administración de Claudia Sheinbaum habría alcanzado un acuerdo con empresarios gasolineros y otros actores de la cadena de valor de los combustibles para mantener el precio de la gasolina regular en 24 pesos el litro durante los próximos seis meses.
Aunque aún no se ha hecho el anuncio oficial, se afirma que el convenio se daría a conocer el jueves entrante. De cumplirse, Pemex establecería un precio de mayoreo nacional en sus terminales de almacenamiento, y las empresas importadoras y distribuidoras ajustarían sus márgenes para no rebasar ese techo. Eso sí, en zonas fronterizas el precio podría ser más bajo, debido a los estímulos fiscales que ya existen en dichas regiones. Quienes defienden la medida aseguran que “aterrizar” el precio en 24 pesos durante medio año dará un respiro a la economía de millones de mexicanos. Otros, en cambio, desconfían y advierten que esta política puede ser un truco pasajero, pues el mercado internacional del petróleo tiene sus propios vaivenes.
El documento indica que la Secretaría de Hacienda mantendrá los estímulos al IEPS, y la Profeco continuará vigilando que los gasolineros no se pasen de listos. Por su parte, Pemex revisaría las dificultades logísticas que pudieran disparar los costos en regiones más alejadas. Y, como si fuera un manual de buenas intenciones, el texto habla de “garantizar precios justos” y “transparentar costos”. Falta ver cómo se traduce todo esto en la realidad cotidiana de las estaciones de servicio, donde hasta un pequeño ajuste en el precio por litro puede ser muy notorio en el bolsillo de la gente.
En el pasado, las promesas de “controlar” el precio de la gasolina han tenido un historial accidentado. Sin embargo, el panorama petrolero global y la dinámica de la producción nacional podrían diferir del pasado. Seis meses parecen una eternidad si la coyuntura internacional (inflación, geopolítica o variaciones abruptas en el crudo) amenaza con rebotar los costos. Aun así, el gobierno apuesta a que, con esta medida, el fantasma de los gasolinazos se quede en pausa, al menos por un rato.
¿Será duradero el “veranito” de la gasolina a 24 pesos? ¿O es un parche que tarde o temprano reventará? Las piezas se acomodan y el juego apenas comienza.
Todos los campos son obligatorios *