Claudia Sheinbaum anuncia la prohibición de la venta de productos chatarra en todas las escuelas de México a partir de 2025, buscando combatir la obesidad infantil con hábitos de vida saludable. Descubre los detalles y el impacto de esta nueva política
El 21 de octubre de 2024, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, presentó un importante avance en su estrategia de bienestar alimentario, que tiene como objetivo combatir los preocupantes niveles de obesidad infantil en el país. Durante su conferencia matutina, la mandataria detalló la prohibición de la venta de alimentos ultraprocesados, comúnmente conocidos como "comida chatarra", en todas las escuelas del Sistema Educativo Nacional. Esta medida, que se implementará el 29 de marzo de 2025, afecta a más de 258 mil escuelas de los niveles básico, medio superior y superior, y forma parte de un esfuerzo más amplio por mejorar la salud y los hábitos alimenticios de los niños y adolescentes mexicanos.
El anuncio de Sheinbaum tiene lugar en un contexto alarmante: México enfrenta una grave crisis de obesidad infantil. Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición, 5.7 millones de niños de entre 5 y 11 años padecen sobrepeso u obesidad, y esta cifra se eleva a 10.4 millones entre los adolescentes de 12 a 19 años. Este problema de salud pública ha sido vinculado directamente al consumo de productos con alto contenido de azúcares, grasas saturadas y sal, como los refrescos, las frituras y otros alimentos ultraprocesados, que han prevalecido en las cooperativas escolares y en las inmediaciones de los planteles educativos.
La presidenta destacó que, a pesar de que ya existían lineamientos previos para regular la venta de estos productos, no tenían suficiente fuerza y su aplicación había sido insuficiente. En un monitoreo reciente, se descubrió que en el 98% de las escuelas aún se vendían alimentos considerados "chatarra", mientras que el 95% ofrecía bebidas azucaradas. Estos datos evidencian la necesidad de una intervención más contundente para cambiar los hábitos alimenticios de los estudiantes y sus familias.
A partir del 29 de marzo de 2025, las escuelas tendrán que cumplir con los nuevos lineamientos emitidos por la Secretaría de Educación Pública (SEP) y la Secretaría de Salud. Entre las principales acciones se incluye la prohibición de la venta de cualquier alimento o bebida que cuente con los sellos de advertencia nutricional establecidos en la Norma Oficial Mexicana 051, que identifican productos con altos contenidos de azúcares, grasas saturadas o sodio. De igual manera, se fomentará el consumo de alimentos naturales y locales, como frutas y verduras de temporada, así como el acceso al agua potable a través de bebederos en las escuelas.
Además, se ofrecerá capacitación a los encargados de las cooperativas escolares para que transformen sus ofertas y den prioridad a alimentos saludables. Esta medida busca no solo mejorar la nutrición de los estudiantes dentro de los planteles, sino también extender estos hábitos saludables al hogar, con la expectativa de que los padres también reduzcan el envío de alimentos ultraprocesados en los almuerzos de sus hijos.
Sheinbaum recalcó que la prohibición de los alimentos chatarra debe ir acompañada de una robusta campaña de educación y concienciación. Para asegurar el éxito de esta estrategia, se implementará un proceso educativo dirigido a todos los actores involucrados: maestros, directores de escuelas, padres de familia y, por supuesto, los propios estudiantes. El objetivo es crear conciencia sobre los peligros de una mala alimentación y los beneficios de una dieta balanceada. Se utilizarán materiales educativos y campañas de comunicación para promover estilos de vida saludables, tanto en las escuelas como en los hogares.
El secretario de Educación Pública, Mario Delgado, también señaló que se fomentará la actividad física en las escuelas como parte de este plan integral de salud, y adelantó que se analiza la posibilidad de extender los horarios escolares para incluir más tiempo dedicado al deporte y la promoción de hábitos saludables.
La presidenta Sheinbaum subrayó que esta iniciativa forma parte de un compromiso mayor por mejorar la calidad de vida de los mexicanos, comenzando desde la infancia. "Es mucho mejor que un niño coma un taco de frijoles a una bolsa de papas, y es preferible que beba agua de jamaica en lugar de refrescos llenos de azúcar", declaró la presidenta, poniendo énfasis en que la salud de los estudiantes depende en gran medida de los alimentos a los que tienen acceso
En este sentido, se pretende que las escuelas se conviertan en espacios donde no solo se promueva la educación académica, sino también la formación de hábitos de vida saludable que puedan extenderse a toda la comunidad. El éxito de esta iniciativa, sin embargo, depende de la colaboración de padres, maestros y autoridades escolares, así como de una correcta implementación de los lineamientos en todos los niveles del Sistema Educativo Nacional.
La prohibición de productos chatarra en las escuelas es un paso significativo en la lucha contra la obesidad infantil en México. Al abordar el problema desde las aulas y las cooperativas escolares, el gobierno de Claudia Sheinbaum busca transformar la relación de los estudiantes con los alimentos, inculcando desde temprana edad la importancia de una dieta equilibrada y el ejercicio regular. Si bien la implementación de estos lineamientos presenta desafíos, su éxito puede marcar el comienzo de una nueva era de salud y bienestar para las generaciones futuras.
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