La CFE aplicó un aumento del 2.38% en sus tarifas eléctricas desde junio, afectando el consumo registrado en julio. Aunque el incremento parece menor, impacta directamente en los recibos de luz durante las vacaciones de verano. Once estados reciben subsidios por altas temperaturas.
Las vacaciones de verano arrancaron con una noticia que afecta directamente el bolsillo de millones de mexicanos: la Comisión Federal de Electricidad (CFE) aplicó desde el 1 de junio un aumento del 2.38% en sus tarifas eléctricas, lo que impactó el consumo registrado en julio. Aunque el ajuste parece menor, representa un incremento acumulado que se refleja en los recibos de luz justo en la temporada de mayor demanda energética.
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Según el portal oficial de la CFE, los precios de la Tarifa 1 —aplicable a uso doméstico en gran parte del país— quedaron así:
En comparación con enero de 2025, los aumentos son evidentes:
Este ajuste, aunque porcentualmente pequeño, puede representar hasta $100 o más de diferencia en hogares con alto consumo por aire acondicionado, refrigeradores, ventiladores y otros equipos eléctricos.
La Tarifa 1F se aplica en 11 estados con temperaturas superiores a los 30°C durante el verano, como medida de apoyo para evitar que el uso de aire acondicionado se convierta en una carga insostenible. Los estados beneficiados en julio fueron:
Este subsidio permite que el costo por kWh sea hasta 30% menor en comparación con la tarifa regular, dependiendo del nivel de consumo y la zona geográfica.
Ante el aumento de tarifas y el calor extremo, la CFE recomienda aplicar medidas de eficiencia energética:
Estas acciones pueden reducir el consumo entre 10% y 25%, dependiendo del tipo de vivienda y hábitos de uso.
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