La petrolera mexicana alista una parada mayor en su refinería de Texas para modernizar la unidad DU-2, clave en la producción de combustibles.
En el corazón industrial de Texas, la refinería Deer Park se prepara para una de las paradas más importantes desde que Pemex tomó control total en 2022. A partir de principios de octubre, la petrolera mexicana iniciará la renovación de la unidad de destilación de crudo DU-2, la más grande del complejo, con capacidad para 270,000 barriles diarios, en un proyecto que se extenderá por 60 días.
La DU-2 es el corazón de Deer Park: descompone el crudo en fracciones que alimentan otras unidades. Durante el mantenimiento, la unidad de craqueo catalítico fluido (70,000 bpd), la hidrocraqueadora para diésel (70,000 bpd) y la coquizadora (92,000 bpd) permanecerán fuera de servicio por falta de materia prima. Solo la unidad DU-1, con capacidad de 70,000 barriles diarios, seguirá operando, lo que reducirá significativamente la producción del complejo, que normalmente procesa 312,500 barriles por día.
Fuentes cercanas al proyecto explicaron que la modernización busca mejorar la eficiencia operativa y reducir riesgos de paros no programados, en línea con el Plan Estratégico 2025-2035 de Pemex, que prioriza la rehabilitación del Sistema Nacional de Refinación y la optimización de activos internacionales. Aunque Pemex no ha emitido un comunicado oficial, se espera que la inversión fortalezca la capacidad de producción de combustibles limpios y reduzca costos de operación a largo plazo.
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