UNAM y Pemex sellan alianza estratégica para innovación tecnológica en hidrocarburos

La UNAM y Pemex unen fuerzas en investigación aplicada y formación especializada para modernizar la industria petrolera mexicana, desde exploración hasta comercialización.

UNAM y Pemex sellan alianza estratégica para innovación tecnológica en hidrocarburos

En un movimiento que podría redefinir el futuro energético de México, la UNAM y Pemex firmaron un convenio histórico que conectará el talento académico con los desafíos prácticos de la industria petrolera. Este acuerdo no es solo papel: implica estancias de investigación en campos críticos como refinación, exploración de yacimientos y logística de hidrocarburos, creando un puente entre las aulas y los campos petroleros.

Los tres ejes de la alianza

  1. Laboratorios vivos:
    Estudiantes e investigadores trabajarán directamente en:

    • Optimización de procesos en refinerías como Dos Bocas

    • Tecnologías para extracción en aguas profundas

    • Desarrollo de fertilizantes y petroquímicos

  2. Formación de alto impacto:

  3. Transferencia tecnológica bidireccional:

    • La UNAM aportará patentes y desarrollos en energías alternas

    • Pemex compartirá datos reales para investigación aplicada

"Esto va más allá de un convenio; es la reinvención de cómo se hace ciencia para la industria energética", destacó el rector Leonardo Lomelí, mientras firmaba el documento que permitirá, por ejemplo, que un estudiante de química trabaje en el desarrollo de aditivos para gasolinas o que un ingeniero mecánico optimice sistemas de transporte de crudo.

El contexto estratégico

La alianza llega en un momento clave:

El director de Pemex, Víctor Rodríguez Padilla, fue claro: "Necesitamos el cerebro colectivo de la UNAM", refiriéndose a los 40 institutos de investigación y 130 carreras profesionales que podrían aportar soluciones.

Primeros proyectos en la mira

Fuentes cercanas al acuerdo revelan que ya se discuten:

  • Un centro conjunto para estudios de transición energética

  • Protocolos para captura de CO2 en instalaciones petroleras

  • Digitalización de redes de distribución con IA

¿Por qué importa?
Esta colaboración rompe con el paradigma de que la industria energética y la academia trabajan separadas. Al integrar a 3,000 investigadores UNAM con los operadores de Pemex, México podría desarrollar tecnologías hechas a la medida de sus desafíos energéticos, reduciendo la dependencia de consultorías extranjeras.

El mensaje es claro: el futuro energético de México se construye con talento local, investigación aplicada y colaboración real.


Compartir Post:

Deja un comentario

Todos los campos son obligatorios *