El Gobierno de Sonora ha logrado reducir un 60% de los trámites necesarios para abrir empresas, una hazaña que ha generado debate entre los sectores involucrados. Mientras algunos aplauden los avances en Mejora Regulatoria, otros se preguntan si esta simplificación es solo maquillaje administrativo. Descubre las implicaciones de esta reforma y su verdadero impacto en la economía.
Sonora, 23 de septiembre de 2024 - En los últimos meses, el estado de Sonora, bajo el liderazgo de Alfonso Durazo Montaño, ha registrado un avance significativo en Mejora Regulatoria, logrando una reducción del 60% en los trámites necesarios para la instalación de empresas. Este progreso, que ha permitido a la entidad escalar del puesto 21 al 13 en el ranking nacional de simplificación de trámites, no ha pasado desapercibido. Aunque muchos aplauden el avance como un hito en la historia del estado, ¿es este un verdadero cambio estructural o simplemente una reducción simbólica?
“Sonora ha realizado la mayor simplificación administrativa en su historia. De los mil trámites iniciales, solo quedan 430, y el compromiso es seguir reduciéndolos para facilitar la inversión y el crecimiento empresarial”
Gobernador Alfonso Durazo Montaño
El gobierno ha implementado una ventanilla única que promete resolver todos los permisos en tan solo tres días, una medida ambiciosa diseñada para atraer a nuevas empresas. Asimismo, se ha incrementado el número de servicios digitales de 24 a 84, con el objetivo de alcanzar los 100 para fin de año. Uno de los servicios más esperados es la licencia de conducir digital, que eliminará las largas filas y permitirá obtener el documento en solo un clic.
A pesar de estos logros, algunos sectores empresariales y analistas han levantado cejas. ¿Qué ocurre con los trámites que aún persisten? ¿Son los 430 trámites restantes realmente indispensables o podrían también ser objeto de revisión? Mientras Durazo se enfoca en llegar al séptimo lugar a nivel nacional, muchos se preguntan si esta carrera por la simplificación no está dejando huecos en la supervisión y la transparencia de procesos clave.
El debate no solo está en las cifras. Algunos empresarios argumentan que la ventanilla única y la digitalización son soluciones superficiales que, si bien agilizan algunos procesos, no abordan los obstáculos estructurales que enfrentan las empresas. Un ejemplo claro es el sector agrícola, que enfrenta una creciente presión regulatoria. Si bien los avances digitales pueden facilitar algunos trámites, sectores como la ganadería y la agricultura demandan más atención en términos de reducción real de cargas burocráticas.
Por otro lado, Sonora se posiciona entre los cinco primeros lugares a nivel nacional en cuanto a desarrollo digital, una realidad que muchos otros estados aún no han alcanzado. Sin embargo, cabe preguntarse si esta digitalización está beneficiando a todos los sectores de la población por igual. ¿Qué sucede con las zonas rurales donde el acceso a internet es limitado?
La simplificación de trámites en Sonora también ha despertado interés en otros estados como Baja California, que busca emular este modelo a través de su propia reforma regulatoria. La pregunta que muchos se hacen es: ¿Estamos frente a un ejemplo a seguir o simplemente ante un maquillaje administrativo que esconde problemas estructurales más profundos?
“¿Son estas reformas reguladoras un alivio real para las empresas o una estrategia para mejorar los rankings sin mejorar los resultados?”
Juan Pérez, experto en mejora regulatoria
Con la Ley de Gobierno Digital como bandera, el estado de Sonora parece estar pavimentando el camino hacia una mayor modernización administrativa. Sin embargo, el reto más grande es asegurar que esta modernización llegue a todos los rincones de la sociedad y que las pequeñas y medianas empresas, las verdaderas generadoras de empleo, se beneficien de estas medidas.
La controversia está servida. Mientras algunos ven en esta reforma un verdadero cambio hacia una Sonora más competitiva, otros creen que aún falta mucho por hacer. ¿Será suficiente esta reducción del 60% para mantener a Sonora en la vanguardia, o será necesario un replanteamiento más profundo de las políticas públicas para garantizar un desarrollo más inclusivo y efectivo?
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