jose.ramirez
Conoce por qué las bicicletas eléctricas han revolucionado la movilidad en la Ciudad de México y qué tan cerca estamos de un posible requisito de licencia para usarlas, según análisis de expertos y legisladores.
Mientras en las calles de la Ciudad de México circulan cada vez más bicicletas eléctricas, la duda sobre si sus conductores deberían tramitar una licencia ha puesto a más de uno a discutir en redes sociales y en el Congreso local. ¿Es realmente necesario exigir un permiso oficial o sería ponerle piedras a un transporte que pinta para ser la estrella del futuro?
Lo cierto es que, hoy por hoy, no existe ningún requisito de este tipo en la CDMX. El Reglamento de Tránsito permite usar las ciclovías con bicicletas eléctricas sin placas o papeleo adicional, igual que cualquier otra bici. Sin embargo, la Secretaría de Movilidad (Semovi) y algunos diputados capitalinos no descartan que, en el mediano plazo, se discutan requisitos específicos: sea limitar la velocidad de los vehículos más potentes o definir normas de seguridad más estrictas. Y es que, en diversos foros, se ha señalado que ciertas bicis eléctricas pueden alcanzar velocidades considerables, afectando la convivencia con peatones y otros ciclistas.
El debate no es menor. Por un lado, hay quienes aseguran que, de imponerse más candados burocráticos, matarían la dinámica de un transporte ecológico, económico y práctico, sobre todo para aquellos que no pueden costear un automóvil o no quieren contaminar. Del otro lado, ciertos activistas y expertos en seguridad vial ven con suspicacia la convivencia de bicis eléctricas y peatones en carriles exclusivos, pues algunos modelos pueden tener la fuerza de un ciclomotor. ¿La solución? Quizá nuevas reglas claras, sin burocracia excesiva, que garanticen la armonía en las calles y la protección de todos.
Hasta el momento, la Subsecretaría de Planeación, Políticas y Regulación de la Semovi insiste en que no hay alerta de seguridad vial que justifique reformar la legislación. Además, las restricciones ya incluidas en el reglamento —como prohibir circular sobre banquetas— siguen aplicándose. En cualquier caso, el auge de este tipo de vehículos es innegable: un estudio del BBVA reveló que representan una opción muy atractiva para gente que antes dudaba en andar en bicicleta por temas de condición física o trayectos con subidas.
Por ahora, respira tranquilo: no necesitas licencia para tu bici eléctrica. Pero mantente con ojo avizor: la movilidad en la Ciudad de México está en constante transformación y, si aumenta la demanda o se registran más incidentes, no sería extraño que las autoridades revisen su postura. ¿Veremos una licencia para ciclistas eléctricos en el futuro o reglas más rigurosas para su fabricación y venta? El tiempo dirá, y la urbe seguirá cambiando.
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