Banamex exalta a Sheinbaum: México, refugio de inversiones

México anda sacando pecho en el panorama económico y financiero, o al menos así lo ve Manuel Romo, director general de Banamex, quien dice que el país es un “norte seguro para las decisiones de inversión”. Pero no solo eso: le atribuye buena parte del mérito a las decisiones de la presidenta Claudia Sheinbaum, cuyo gobierno, según Romo, ha sabido mantener la calma y no dejarse llevar por las presiones externas.

En la 33 Reunión Plenaria de Consejeros del grupo financiero, el directivo soltó unas cuantas perlas, enfatizando que es momento de:

1. Pensar con cabeza fría. Nada de caer en berrinches o conclusiones apresuradas.
2. Cuidar la estabilidad política, social y macroeconómica que México ha construido con esmero.
3. Aprovechar las fortalezas de un país que presume diversidad productiva, apertura comercial y una población joven que no está para desperdiciarse.

Romo pintó un escenario donde, pese a que Estados Unidos —con el segundo periodo de Donald Trump— amaga con aranceles como si fueran regateos en un tianguis, México luce firme. Afirmó que el gobierno de Sheinbaum mantiene un espíritu de cooperación y una buena estrategia para torear este tipo de amenazas. ¿Será suficiente? Más de uno dirá que sí, mientras otros se rascan la cabeza con dudas.

Además, resaltó dos temas que, en su opinión, son cruciales:

• Consolidación fiscal: impulsada desde Hacienda, con medidas que refuerzan la disciplina financiera y la autonomía del Banco de México, y que también le hacen ojitos a la inversión privada, tanto nacional como extranjera.
• Plan México: un proyecto que, según Romo, trae objetivos claros para echarle ganitas al desarrollo económico, y que se basa en:
  • Apoyo a las PyMEs,
  • Inversión en energía e infraestructura,
  • Simplificación de trámites,
  • Incentivos fiscales para la relocalización,
  • Construcción de nuevos polos de industrialización y
  • Fortalecimiento del talento mexicano.

Con ese combo, Romo asegura que Banamex ve con buenos ojos el futuro, y promete poner de su parte para arrimar el hombro en el crecimiento nacional. Dice que andan invirtiendo un buen dineral en su transformación digital, porque quieren competir fuerte en banca corporativa y otros segmentos de la banca universal. La apuesta está sobre la mesa, y juran que habrá resultados.

Eso sí, el directivo no se anduvo con rodeos en el tema de Trump: “Hay que estar tranquilos y no perder la cabeza con sus amenazas”. Nada de decisiones al vapor, ni encender alarmas donde todavía no hay fuego. Al final, si México sostiene su rumbo y aprovecha sus cartas, podría convertirse en la piedra angular de las inversiones en el continente, o hasta en el mundo entero. Pero eso, como muchos sospechan, dependerá de que las buenas intenciones se vuelvan hechos concretos y no se queden como otro mero cuento de hadas.